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Así lo muestra la Encuesta Nacional sobre Violencia y Acoso en el Mundo del Trabajo en Argentina elaborada por la Universidad Nacional de Avellaneda y la Red Nacional Intersindical contra la Violencia Laboral, con el impulso de la iniciativa Spotlight.
Un estudio divulgado por la Universidad Nacional de Avellaneda y la Red Nacional Intersindical contra la Violencia Laboral da cuenta de que seis de cada diez trabajadores y trabajadoras padeció situaciones de violencia laboral.
Los datos fueron obtenidos a través de la Encuesta Nacional sobre Violencia y Acoso en el Mundo del Trabajo en Argentina elaborada con el impulso de la iniciativa Spotlight, y se presentaron el miércoles último en la Cámara Baja del Congreso Nacional al cumplirse un año de la publicación de la Ley 27.580, que dio aprobación a la ratificación del Convenio 190 de la OIT sobre la violencia y el acoso en el mundo del trabajo, por parte del Congreso de la Nación.
Los resultados de la encuesta reflejan también que tres de cada diez dijeron padecer la violencia en su actual trabajo. La violencia psicológica es la que mayores menciones acaparó (78% de los casos), seguida de situaciones ligadas a la discriminación (67%), y finalmente, violencia sexual (52%) y física (35%).
Foto: Télam
Además, el estudio afirmó que la violencia laboral tiene mayor prevalencia en los trabajadores y trabajadoras de más de 30 años y entre quienes poseen mayores niveles educativos. De la misma manera, para el 15,8% de los trabajadores y trabajadoras, las situaciones de violencia aumentaron a partir del inicio de la pandemia de Covid-19, mientras que para el 3,3% aparecieron por primera vez durante ese momento.
La encuesta corroboró que la violencia en el ámbito laboral se ejerce mayormente desde posiciones jerárquicas, amparada en las asimetrías de poder. Según los datos, los superiores jerárquicos ejercen, en mayor medida, violencia psicológica, discriminación y comentarios sexistas, mientras que los usuarios, clientes y pacientes, tienen un rol prioritario en la violencia física.
Otro dato relevante de la encuesta es que solo tres de cada diez personas que sufrieron violencia o acoso en el ámbito laboral realizaron la denuncia y entre estas personas, fueron los sindicatos los que mayormente acompañaron a los trabajadores y trabajadoras en la realización de estos reclamos.
La violencia según el género
El porcentaje de violencia laboral es mayor en mujeres y personas no binarias: entre los varones, el 43,5% respondió que experimentó violencia laboral, mientras que para las mujeres llega a un 65,5% y al 87,6% para personas no binarias.
En el caso de la discriminación, las mujeres y las personas con género no binario muestran ser los sectores más vulnerables (72,5 y 92,4% respectivamente). La percepción sobre este tipo de violencia, así como la psicológica, aumenta a mayor nivel educativo.
En la violencia sexual también se observan grandes diferencias según el género: las mujeres la sufren en un 59,5% y las personas no binarias en un 83,7%.
En tanto que la violencia física es mayormente experimentada por quienes no se auto-perciben como varón o mujer (75,9%), en tanto que no se observan mayores diferencias entre los géneros binarios (34,6% en mujeres y 33,9% en varones). Este tipo de violencia no presenta diferencias por rango etario, nivel educativo y sector en la estructura económica.
El 27,4% de las mujeres y el 44,8% de las personas no binarias consideraron que su género autopercibido influía negativamente en el trato recibido, mientras que en los varones, sólo el 5,4% manifestó esta situación.
El género masculino, a diferencia del femenino y de las personas no binarias, mantiene una situación de menor vulnerabilidad en casi todas las variables analizadas.
"Los segmentos más jóvenes son los que perciben en mayor proporción que la condición de género influye negativamente entre las mujeres y otros géneros no masculinos en las situaciones de violencia. Al analizar esta problemática por sector de la economía, en la encuesta puede apreciarse que el género influye negativamente en mayor proporción en el trabajo doméstico (57,7%), en las actividades extractivas (61,7%), en el arte y recreación (47,9), así como actividades profesionales y técnicas (41,8%)", sostiene el informe.
Y agrega: "En cuanto a sufrir algún tipo de discriminación cursando embarazos, un 12,1% de las personas gestantes encuestadas manifestó haber transitado dicha situación. El porcentaje de personas que percibieron haber sufrido peor trato y/o discriminación durante el embarazo aumenta a medida que aumenta el nivel de educación, alcanzado llegando al 20,8%".
El perfil del victimario, cuando se refiere a violencia psicológica, discriminación y comentarios sexistas, suele ser varón en una posición de superior jerárquico, seguido de pares.
El rol de los sindicatos
El 30% de las trabajadoras y trabajadores encuestados declaró haber denunciado alguna situación de violencia laboral, ya sea experimentada por ellos o por terceros. Los sindicatos fueron los mediadores mayormente nombrados por parte de quienes realizaron denuncias, manifiesta el informe.
"Entre quienes no realizaron la denuncia, el 27% indicó que no creyó que el acto de denuncia sirviera de algo y casi el 20% declaró que no le pareció relevante realizarla. Otras menciones que merecen atención son las que refieren al miedo a perder el trabajo (15%) y al desconocimiento de a quién recurrir para realizar la denuncia (13%)", advierte el estudio.
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